Ketel Marte White Sox vetan de por vida a fan que insultó a su madre

Somos Diario
3 Min de lectura

Ketel Marte, segunda base de los Arizona Diamondbacks, vivió una de las noches más duras de su carrera cuando un fanático de 22 años lo hirió con un comentario sobre su madre fallecida durante el juego del martes en el Guaranteed Rate Field de Chicago.

Según reportes coincidentes de ESPN y MLB.com, la organización de los White Sox reaccionó de inmediato: el agresor fue expulsado del estadio y recibió un veto indefinido que se extiende a los 30 parques de Grandes Ligas.

El insulto llegó en la séptima entrada, justo después de que Marte fallara un turno al bate. Al notar sus lágrimas, el mánager Torey Lovullo salió al montículo, lo abrazó y le soltó una frase que dice mucho de la cultura interior del club “Te quiero, estoy contigo; no estás solo”. El compañero Geraldo Perdomo también alzó la voz pidiendo sanciones “más firmes” para preservar la integridad de los peloteros.

Lejos de encogerse, el dominicano respondió con el bate: se fue de 4-2, incluyó un jonrón en la primera entrada y elevó su línea ofensiva a .320/.424/.608 con 15 vuelacerca números que lo mantienen vivo en la conversación para el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional.

El caso reaviva un debate que la MLB arrastra desde episodios como el vivido por Adam Jones en 2017, cuando un fan de los Red Sox fue expulsado y vetado por un insulto racial en Fenway Park. Entonces, la liga endureció su código de conducta para aficionados; hoy, esa normativa vuelve a ponerse a prueba.

Más allá de la sanción individual, expertos en seguridad deportiva consultados por este medio señalan que las franquicias trabajan en protocolos de “tolerancia cero” que incluyen identificación biométrica y mayor formación del personal de seguridad para detectar conductas abusivas. La meta es clara que el estadio siga siendo un espacio de pasión, nunca de violencia verbal.

Mientras tanto, Marte ha preferido no dar declaraciones. Su forma de hablar fue mirar al cielo después del cuadrangular, el mismo gesto con el que honra a Elpidia Valdez desde 2017. Un recordatorio de que, en el diamante, la línea que separa la euforia del irrespeto no debe cruzarse jamás.

Comparte este artículo